El Día Internacional de la Enfermería o Día Internacional del Enfermero es una jornada conmemorativa de las contribuciones de los enfermeros a la sociedad, promovida por el Consejo Internacional de Enfermería, que se celebra en todo el mundo cada 12 de mayo, conmemorando el nacimiento de Florence Nightingale, considerada “fundadora” de la enfermería moderna.
Uno nunca debe subestimar la capacidad de alguien para crecer. Algunos cambios fueron increíbles. Cada uno de ellos experimentó una variedad de emociones, como la negación, el miedo, la ira, el remordimiento, más negación y finalmente la aceptación. Cada paciente encontraba su paz antes de partir.
Cuando alguien les preguntaba acerca de los arrepentimientos que tenían o acerca de cualquier cosa que hubieran hecho de manera diferente, casi siempre surgían los mismos temas. Estos son los 5 más comunes:
1. Ojalá hubiera tenido el coraje de vivir una vida siendo fiel a mis sueños
Este era el lamento más común de todos. Cuando las personas se dan cuenta que su vida está a punto de terminar, pueden mirar atrás con claridad y es fácil ver cuántos sueños no han sido realizados. La mayoría de la gente no había cumplido aún ni la mitad de sus sueños e iban a morir sabiendo que esto se debía, a las elecciones que había o no habían hecho durante su vida.
Es muy importante que trates de realizar al menos algunos de tus sueños durante la vida, ya que en el momento en que se pierde la salud, es demasiado tarde. La salud nos trae una libertad que muy pocos nos damos cuenta antes de perderla.
2. Desearía no haber trabajo tan duro
Cada paciente de sexo masculino que cuidé decía lo mismo. Se perdieron la juventud de sus hijos y la compañía de sus parejas. Las mujeres también se arrepentían de esto, pero como la mayoría eran de una generación anterior, muchas de las pacientes de sexo femenino no habían tenido que sostener la familia. Todos los hombres que cuidé lamentaban profundamente haber gastado su vida en torno al trabajo.
Al simplificar tu estilo de vida y tomar decisiones conscientes a lo largo de tu vida, es posible que no necesite los ingresos que crees que necesitas. Con la creación de más espacio para ti, andarás más feliz y más abierto a las nuevas oportunidades.
3. Ojalá hubiera sido capaz de expresar mis sentimientos
Muchas personas no expresaban sus sentimientos con el fin de mantener la paz con los demás. Como resultado, nunca se convirtieron en lo que eran realmente capaces de llegar a ser. Hay muchas enfermedades que desarrollan sentimientos de amargura y de resentimiento.
No podemos controlar las reacciones de los demás. Sin embargo, aunque las personas pueden reaccionar diferente cuando nos expresamos honestamente, al final las relaciones son llevadas a un nivel más saludable. O pasa eso, o nos damos cuenta que la relación a la que nos estamos enfrentando no es para nosotros, de cualquiera de las dos formas, salimos ganando.
4. Ojalá me hubiera quedado en contacto con mis amigos
Muchas personas se dan cuenta del real valor de los amigos a solo semanas de morir. Mucho de ellos fueron quedando en el camino debido a la rutina que muchas veces aleja a las personas y a la hora de querer ubicarlas porque no queda tiempo.
Muchos de ellos habían llegado a estar tan atrapados en sus propias vidas que habían abandonado grandes amistades con el paso de los años. La gente se lamentaba mucho de no haber dedicado el tiempo y el esfuerzo que se merecían sus amigos. Todo el mundo extraña a sus amigos cuando está muriendo.
5. Me gustaría haber sido más feliz
Muchas personas no se dan cuenta hasta el final de que la felicidad es una opción, han permanecido estancados en viejos patrones y hábitos, el conocido confort o familiaridad se sobrepuso a sus vidas tanto física como emocionalmente. El miedo les dejó haciendo creer a otros, y a ellos mismos, que eran felices, pero cada vez las risas y las tonterías tardaban más tiempo en aparecer en sus vidas.
Cuando uno está en su lecho de muerte, lo que otros piensan de ti es algo que uno deja de pensar. ¡Qué maravilloso es ser capaz de dejar ir las cosas y ser capaz de sonreír, mucho antes de saber que te estás muriendo. La vida es una elección, la que estás viviendo es tu vida. Elige conscientemente, elige sabiamente y elige honestamente. Elije la felicidad.