Mientras estamos metidos en el problema de la contaminación, los abusos contra maestros de Chiapas, enfrentamientos en penales, secuestros, y futbol, el dólar se dispara a los 18.95 pesos.

Ya lo advertía el Doctor Agustín Carstens, el gobernador del Banco de México. Desde enero dijo que hay que preparase para un choque grave. La volatilidad –aseguró Carstens- que ha llevado el peso a su peor desempeño mensual en cuatro años, se debe al nerviosismo ante la próxima alza de las tasas de interés en los Estados Unidos. Yo agrego que el referéndum este mes en el Reino Unido para permanecer o no en la Unión Europea sin duda también presiona los mercados y a nuestra moneda.

El Doctor Carstens aseguró que el Banco de México está atento ante lo que suceda y tiene la herramientas para garantizar que el mercado opere de manera ordenada y con liquidez. El Fondo Monetario Internacional aumentó la línea de crédito flexible de 67 mil millones de dólares a 88 mil millones. La Secretaría de Hacienda se congratuló de este aumento y dijo que era una muestra de solidez de la economía. Más tarde se supo la extensión del crédito tuvo un costo que no cayó del cielo, fue una solicitud de la Secretaría de Hacienda al Banco Mundial y Fondo Monetario Internacional, que representó un pago de 200 millones de dólares. Es importante subrayar que este crédito está ahí de protección, un blindaje en caso de que sea necesario, esperemos que no. La correduría Moodys aseguró que la petición de Hacienda puede ser interpretada como el reconocimiento de que México tiene insuficientes reservas para afrontar la volatilidad y que la economía nacional es más vulnerable de lo que se reconoce. El monto de las reservas es de 176 mil 994 millones de dólares.

La economía esta prendida del dinero que mandan los mexicanos que trabajan en los Estados Unidos que de enero a abril enviaron 8 mil 388 millones de dólares. Este dinero fomenta la economía interna.

Hablando de blindaje, el lunes 30 de mayo, una camioneta blindada que transportaba al ex presidente Felipe Calderón en gira proselitista por Cancún, Quintana Roo, chocó contra una camioneta Cherokee de modelo ya viejo que conducía Manuel Gutiérrez Canul, de 21 años de edad, de oficio tapicero. Ya se imaginará lo que sucedió una camioneta de más de una tonelada de peso choca contra otra muchos menos pesada, fue pérdida total para el tapicero y no tenía seguro. Gutiérrez Canul fue bajado con violencia de la camioneta, lo encañonaron miembros del Estado Mayor Presidencial que acompañan a Calderón. EL joven dijo que no vio ni quien venía manejando, ya que lo retuvieron y lo golpearon mientras el ex presidente fue subido a otro vehículo y sacado del lugar. El joven aseguró que la camioneta circulaba a alta velocidad, se pasó un alto y se impactó contra él. Además del susto,  Gutiérrez Canul, pide el pago de su camioneta. Hasta ahora ni el expresidente ni su staff se ha comunicado con él, ni un “usted disculpe” ante este atropello, ni un twitt.

Calderón si tuvo tiempo para mandar un Twitt:   “En QR en apoyo a Carlos Joaquin. Al llegar a Kantunilkín, nuestro vehículo fue impactado fuertemente por otro que no frenó. Estamos bien”. El joven que tuvo la mala suerte de cruzarse en el camino de la Suburban, opina lo contrario.

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